martes, 18 de diciembre de 2007

10 de Mayo de 2006

Hoy voy a retomar el blog que desde el 14 de octubre, día de nuestro nacimiento no escribo nada, después de partidos memorables y no tan memorables, con injusticias arbitrales, con la enfermería a rebosar y todas las semanas con algún inquilino nuevo, quiero volver. Esta noche viendo uno de los blog que visito varias veces al día, el blog de Jesús Alvarado, recordé el día más grande para mí desde que un día decidí, por voluntad propia y con toda la libertad, ser del mejor equipo del mundo, ser del Sevilla F.C., ser sevillista. Hemos tenido últimamente grandes noches, grandes finales. Pero ninguna para mí, como la del 10 de mayo de 2006. Esa noche, era la noche que tanto habíamos esperado los sevillistas, la noche en que por fin conseguíamos lo que tanto habíamos anhelado, era la noche de nuestra UEFA, Eindhoven se rindió a los pies de mi Sevilla.
Después llegaron Mónaco, Glasgow, Madrid y Madrid otra vez, pero la magia de Eindhoven fue diferente, fue la noche de nuestro título, la noche que muchos esperábamos y que otros muchos no lo pudieron ver. Fue para mi la mejor noche, el mejor título después de el de sevillista, como dice Alvarado.
Después han venido más, muchas noches inolvidables pero no como aquella, y como todo no nos podía ir tan bien, también la hemos tenido noches negras, muy negras y hemos disfrutado de lo mejor y también hemos sufrido de lo peor, lo que peor nos podía haber pasado, nos pasó, Antonio nunca te olvidaremos.
Todo esto lo escribo para que sirva de presentación para este video, que refleja bastante bien el sentimiento de aquella noche.